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Esperamos que la 4t no Acabe con lo Mejor que Tenemos

Por María Elena Maldonado

Argonmexico / Quizá muchos no estén enterados lo que es El Centro de Investigación y Docencia Económicas, A.C. (CIDE), hasta hace poco tiempo yo no sabía que es una universidad pública de investigación y laboratorio de ideas especializado en ciencias sociales, cuya fundación se realizó en 1974, su único plantel se ubica en la Ciudad de México y pertenece al Sistema de Centros Públicos de Investigación del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).

Su alto rigor académico – el proceso de admisión es competitivo por lo que es de las más bajas del mundo- por ello su calidad en investigación la han llevado a ser reconocida nacional e internacionalmente, obteniendo la calificación como la mejor universidad de México para graduarse como licenciado en Derecho, Economía y

Relaciones Internacionales.

Quizá por ello el actual mandatario le ha retirado su apoyo, aunque podría ser que ni este enterado que existe, sabemos que lo de él no es el conocimiento a fondo de las situaciones del país, siempre tiene otros números, y realmente está recortando el presupuesto parejo a todo lo que no sean sus absurdos caprichos –Dos Bocas, Tren Maya, Aeropuerto de Santa Lucia- que bajo dictamen de los especialistas ni costaran, ni podrán terminarse en lo que él peje obstinadamente y sin fundamentos predice lograr.

Aquí les comparto otras historias provocadas por el mismo personaje, que en su austeridad republicana y centralización del poder realiza absurdos al grado de que a Marcos Nahmad, científico mexicano especializado en biología cuantitativa, que consiguió lo aceptaran para hacer una estancia académica en un centro de investigación en Chicago, Estados Unidos; negoció que le pagaran el hospedaje y él puso de su bolsa los boletos de avión. Ya estaba todo aprobado por el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), al que pertenece, pero ayer se enteró que ahora tendrá que conseguir la autorización firmada de puño y letra del presidente Andrés Manuel López Obrador. Esto es absolutamente ridículo Y luego leemos: “Llevamos reportando desde 1998 los incendios en el país. Ni la NASA tiene nuestra tecnología para enviar imágenes, pero hace un mes nos cortaron el internet de alta velocidad”. Palabras del Dr. José Sarukhán coordinador de La Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) en una entrevista para Enfoque Noticias. ¿Qué sucedió? Que el recorte presupuestal afectó las labores de una

institución fundamental para el conocimiento, y la preservación de la biodeiversidad. José Woldenberg añade que el problema, sin embargo, es mayor y quizá no lo hemos dimensionado como es debido. Son centenas, quizá miles las dependencias estatales que han resentido en mayor o menor medida la disminución de sus presupuestos y las derivaciones de ello difícilmente las podemos evaluar hoy con claridad.

¿Alguien lleva la cuenta? ¿El propio gobierno tiene una idea de las afectaciones que está desencadenando? Solo dos botones de muestra: cierre de estancias infantiles y cese del financiamiento público a organizaciones civiles (salvo algunas directamente ligadas a la presente administración como los Cendis del PT).

Todo ello se ha presentado bajo el amparo de una aspiración incontestable: austeridad. La palabra tiene connotaciones positivas cuando alude al cese de gastos suntuarios, a la racionalización de los recursos o a la interrupción del despilfarro. Pero estamos aprendiendo que la noble austeridad también quiere decir despidos súbitos, reducciones de salarios arbitrarias, cancelación de programas importantes, rebajas severas que impiden a las instituciones cumplir con sus encomiendas.

Las instituciones públicas son frágiles. Son arboles sujetos a los azares de los incendios y las sequías, a los vaivenes e inconstancias de la política. Un árbol centenario puede ser talado en minutos.

Para continuar con el recuento del desastre que es muy largo, únicamente añado la triste historia del director Enrique Bátiz que anda tocando puertas para continuar con la Orquesta Sinfónica de Chimalhuacán Independencia, a la que le liquidaron 71 músicos; esto derivado de los recortes presupuestales por parte del Gobierno federal.

Por ello el director busca apoyo de algún ayuntamiento del Estado de México o en alguna alcaldía de la Ciudad de México. Sin embargo, hasta ahora sigue en el limbo.

De aquí y allá reflejo la profunda preocupación de los diferentes sectores culturales y científicos por la zozobra y agonía en la que se encuentran. Cuando deberían ser el pilar que soporta el avance del país. Triste futuro nos espera si continuamos permitiendo esta austeridad muy pero muy mal administrada.

 

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