Infamias y Abusos de Poder Contra Profesores Libres de Ecatepec
argonmexico.com / Ahora es Cuando Chile Verde, le haz de dar Sabor al Caldo… Luego de más de 23 días sin clases, los casi 300 alumnos de la Escuela Secundaria Técnica No. 174 “Ignacio Manuel Altamirano”, ubicada en Ecatepec, estado de México, retornan este lunes a las aulas. Lo extraño del “paro loco” orquestado y dirigido por un “profesor”, es que “lo avalan” mandos medios del sector educativo del estado de México, con la intención de expulsar al “incómodo” director.
Para impedir las labores de la secundaria federalizada nacida en septiembre de 1997 sin aulas, sólo bajo la sombra de un árbol de pirú y en medio de pedreras, desde la Jefatura del Departamento de Secundarias Técnicas y la Supervisión regional de Servicios Educativos Integrados del Estado de México (SEIEM), se apoyó al “profesor” Edson Barrera Lluvia, para que suspendiera clases sin mayor pretexto que “echar fuera al director.
Como corolario de las repetidas agresiones al profesor Sergio Peralta Encarnación, al encabezar el pasado miércoles una protesta con cientos de padres de familia y alumnos en la Vía Morelos, el director y dos padres fueron detenidos, con lujo de violencia, por policías municipales de Ecatepec. Para obtener su libertad, los tres “delincuentes” tuvieron que pagar una fianza de 39 mil pesos.
De nada les valió que su reclamo: volver a tener clases en la 174 y que les enviaran profesores dispuestos a entrar a las aulas. Los uniformados de la fuerza “antimontines”, del municipio que encabeza el priísta Eruviel Ávila, arremetieron con fiereza contra los “rijosos” y, a punta de patadas, puñetazos y toletazos, los fundieron en las “patrullas” que los condujeron a la Agencia del Ministerio Público de Ecatepec.
En las “galeras”, donde permanecieron más de 18 horas, el profesor, el taxista de bicicletas y el mecánico bicicletero, fueron “acomodados” al lado de supuestos narcomenudistas, defraudadores “confesos” y “ladrones de la pobreza”.
Detrás del embrollo policiaco-judicial, permea la denuncia comentada por uniformados al propio director: nos ordenaron “madrearlos” y cargarlos a la fuerza hasta el MP. “Nosotros sólo cumplimos esas órdenes”, dijeron en su descargo mandos policiacos municipales.
Coincidentemente, luego de suspender clases el 10 de diciembre pasado sin ningún argumento válido, alumnos azuzados y dirigidos por el “profesor” Edson Barrera, se dijeron arrepentidos de su conducta y optaron por retornar a sus clases este lunes, para apoyar al profesor Sergio Peralta.
Cronología de la Infamia
Hace 12 años, un profesor oriundo de Tixtla, Guerrero, Sergio Peralta Encarnación, fue designado director de una escuela inexistente en Cerro Gordo, municipio de Ecatepec. Hasta la calle Bugambilias S/N, bajo un árbol de pirú en las faldas del cerro de la colonia Buenavista, poblado de Santa Clara, arribaron con él otros dos profesores, designados para abrir dicho centro educativo.
Pese a la desolación del lugar, pero estimulados por la pobreza de los habitantes de la zona, los mentores iniciaron su labor educativa debajo del árbol con 24 estudiantes. Actualmente, construida palmo a palmo por las propias manos de los mentores, y con la faena de los padres de familia, la Secundaria Técnica 174 cuenta con aulas, dos laboratorios de Ciencias, una cancha con gradería para deportes, biblioteca y taller de cómputo.
En diciembre de 2004, los académicos decidieron acercar a estudiantes y padres de familia a la cultura, y celebraron la Semana Cultural Altamiranista. Año tras año pusieron mesas y sillas para dar comida a la comunidad de la escuela, e invitaron a grupos de danza folclórica de la región, distinguidos músicos como Gabino Palomares y escritores como Elena Poniatowska.
Donde el amado árbol de pirú, se hizo un foro al aire libre para ofrecer a la comunidad espectáculos que el director, apoyado por tres profesores: Yeréndira Cano Mejía, Víctor Manuel Meneses Becerril y Manuel Soriano Álvarez, llevaron al plantel educativo que convirtieron en faro luminoso de las bellas artes, supliendo así lo difícil para padres de familia llevarlos a estos eventos por sus carencias económicas.
Lograron la asistencia de grupos musicales, teatrales, de ballet; destacados solistas y conferencistas, sin costo alguno. Mientras, la escuela fue hermoseada por murales realizados por muralistas destacados en Ecatepec, la siembra de cipreses y árboles frutales.
Educación y Finos Modales de Alumnos
Esos logros convirtieron al director de la Técnica “Ignacio Manuel Altamirano”, como suele pasar en este país, en incómodo para el gremio y autoridades de Educación mexiquenses, quienes hace años lo atacan, calumnian y quieren destituirlo, al grado que a fines de 2009, la escuela sólo tiene como Plantilla de Personal: cinco Profesores.
Luego de inventarle la violación de una “profesora”, denuncia judicial que no procedió por falta de pruebas, el 19 de enero de 2010 profesores, alumnos y padres de familia se toparon con que la escuela tenía las puertas de acceso sueldadas, para impedir las labores educativas, presentando sellos de la Supervisión Escolar XIX del Gobierno del Estado de México.
Un día después, el miércoles 20, desesperados, en su afán de justicia por el derecho a la educación de sus hijos, y a que se escucharan sus protestas, los padres de familia decidieron marchar sobre la Vía Morelos hacia la Presidencia Municipal.
Lástima, a las 9:20 horas fueron reprimidos con lujo de violencia por tripulantes de las patrullas SP09-08 y SP07-02. Acusados por “ataque a las vías de comunicación”, dos padres y el director de la escuela fueron detenidos y conducidos al MP, a cargo de María Elena Camacho, quien inició la Averiguación Previa EM/II/607/2010; cuyos lamentables sucesos fueron filmados por los manifestantes.
Fue hasta las once de la noche cuando a cada uno de los detenidos, ciudadanos comunes, se les fijó una caución por 60 mil pesos 00/100 M.N. A las 2 de la madrugada del 21 de enero de 2010, se consiguió su libertad tras pagar una fianza de 13 mil pesos por cada uno; monto que la humilde comunidad recolectó con pesos y centavos.
Interrogados sobre su decisión de marchar sobre la Vía Morelos, y hacerles saber cometieron un delito previsto por la Ley, expresaron no tener conocimiento que a quienes obstruyen las calles con motivos religiosos, como quienes acuden a la Basílica de Guadalupe, hayan sido consignados por el delito de Ataques a las Vías Generales de Comunicación.
Esta historia puede ser la de cualquier mexicano comprometido con su vocación, con hambre de justicia social, quienes al acudir a las instancias correspondientes, la respuesta es: no es de nuestra competencia. No procede, o simplemente no prospera. Entonces, ¿la Letra, con Cárcel Entra?… Vaya un Carcelero más, y Arreglar la Época de Nuevo.
Comentarios: [email protected] y [email protected]