Senador Juan Antonio Martín del Campo, en la Discusión del Dictamen en Materia del Marco Jurídico Para las Actividades de Transición Energética, y Para los Sectores Eléctrico y de Hidrocarburos
Jaime Arizmendi
Con el permiso de la Presidencia.
Argonmexico / El día de hoy es una sesión muy importante para todo lo que es nuestro país porque estamos votando once leyes, ocho leyes nuevas y tres modificaciones.
Bueno, pues decirles que esto fue “fast track”. Lo comentamos precisamente en la comisión y, bueno, pues simple y sencillamente vemos cosas positivas, pero también igual vemos cosas negativas, o que hay algún retroceso.
Y, por lo tanto, propusimos un Parlamento abierto, propusimos que personas expertas en la materia vinieran y nos explicaran, y también igual conocer su punto de vista para poder tomar la mejor decisión. No la mejor decisión para mi partido político, la mejor decisión precisamente para México, porque hoy lo que decidamos aquí puede repercutir para bien o para mal precisamente para todos los mexicanos.
Nos encontramos ante un paquete de iniciativas que lejos de fortalecer el sector energético de México, busca consolidar un modelo monopólico y un modelo obsoleto.
Hoy lo que nosotros sí estamos a favor, al igual que muchos mexicanos, es el poder tener energías limpias, energías más económicas, acceso eléctrico a todos los mexicanos, reducir la pobreza eléctrica, por supuesto terminar con la corrupción y, algo muy importante, bajar el precio de las gasolinas, que es algo que se nos prometió en campaña y hasta el día de hoy no ha pasado. Y vaya que hemos presentado varias iniciativas en ese sentido y el gobierno no ha querido ni tampoco el grupo mayoritario ni sus aliados.
Sin embargo, las acciones realizadas nos demuestran que ésas no son la prioridad del gobierno. Las reformas que hoy presentan afectan precisamente el sector energético, limitan la competitividad y ponen en riesgo la seguridad energética del país.
Por ello, expresamos nuestro rechazo ante este paquete de reformas. ¿Por qué?: porque es un modelo centralista que frena el desarrollo. Hoy limita la participación de la generación de energía y concentra todo el poder en la Comisión Federal de Electricidad en un 54 por ciento.
Por lo tanto, la infraestructura de la Comisión Federal de Electricidad es insuficiente para garantizar el suministro de energía confiable. Esto deriva en apagones muy frecuentes, y esto ya lo empezamos a ver en cada uno de nuestros hogares y, por supuesto, en la industria.
Al igual que tarifas más altas para los mexicanos. Hoy si se quiere traer inversión, por supuesto que los inversionistas piden mínimo tres cosas. Uno, seguridad, que, por cierto, en seguridad estamos reprobados. Dos, que tenga el suministro de agua; y tres, que tenga suministro de energía. Y hay varios estados de la República Mexicana que ya no pueden contratar más energía simple y sencillamente por qué,
porque están al límite y, por lo tanto, ahí sí hace falta una gran inversión y es algo que no viene considerado precisamente en la reforma.
Y, por otro lado, si hablamos de Pemex, un gigante en crisis, la iniciativa ignora la crisis financiera de Pemex, cuya deuda asciende a 1.9 billones de pesos.
En lugar de fomentar alianzas estratégicas, hoy imponen un modelo de bloqueo a la inversión.
Pero también déjenme decirles que nosotros siempre hemos votado en congruencia y no somos oposición por oponernos simple y sencillamente, también vemos la parte positiva de este tipo de reformas, en la cual vemos y vamos a votar a favor, y lo hicimos precisamente en la comisión, como por ejemplo, la Ley de Planeación y Transición Energética, la Ley de Biocombustibles, que es una iniciativa muy buena y muy positiva y también la de geotermia. Esas son reformas que sí vamos a apoyar, pero las otras tienen deficiencias.
Además, queremos dejar en claro que sí hay alternativas reales y viables para mejorar el acceso a las energías y reducir los costos para las familias mexicanas.
Nosotros presentamos…, aquí yo presenté una iniciativa precisamente en ese sentido para dar facilidad a todos los hogares mexicanos y que con esto tengan energía propia a través de paneles solares, y sus recibos de luz se reduzcan hasta en un 90 por ciento. Esto sí es posible.
Mientras tanto, sabemos que este tipo de reforma busca concentrar el poder monopólico y obsoleto, nuestra iniciativa…, y en este modelo busca tener energías, por supuesto, sustentables, accesibles y por supuesto el poder ayudar a todos los mexicanos.
Si realmente queremos fortalecer el sector energético y beneficiar a los mexicanos, debemos impulsar políticas que fomenten la generación de energías limpias, competitivas y el uso eficiente de los recursos.
Por eso, nosotros hemos sido claros en la comisión, que hay tres reformas que por supuesto vemos con buenos ojos, que sí ayudan a los mexicanos, pero las otras reformas por supuesto que tienen un retroceso.
Es cuanto, presidente.