“Coriolano” Destaca en el 42 Festival de Teatro de Málaga
María Esther Beltrán Martínez
Argonmexico / MÁLAGA, Esp.- Se presenta la segunda parte del 42 Festival de Teatro de Málaga con diversas puestas en escena. “Coriolano”, procedente del Festival de Mérida; donde Carmen Conesa y Roberto Enríquez se roban la escena y transmiten como los grandes actores que son. Verlos es una experiencia que se queda en la mente por varios días. Seguramente William Shakespeare se hubiera emocionado al ver cómo transmitían sus textos.
Es una puesta en escena seductora y de una calidad a la altura de los buenos festivales de teatro como es el de Mérida. Participan Manuel Morón, Álex Barahona, Santiago Molero, Juan Díaz, María Ordoñez, Beatriz Melgares y Javier Lara.
La compañía explica que es una obra maestra en donde a la trama política del texto se le une una gran intensidad emotiva. Roma. Inicios de la República. La población se encuentra envuelta en una gran conflictividad social, la inminente guerra, el hambre y las luchas políticas fomentan la aparición de demagogos y de vanidosos que piensan sólo en sus intereses y dan rienda suelta al juego de la política y del poder. Cayo Marcio, luego apodado Coriolano, un ser honesto y coherente con sus ideales, rehúye la hipocresía del juego político desafiando el destino que su poderosa madre ha diseñado para él. Pero Marcio es también un heroico militar extremista, henchido de orgullo patricio que se opone a las reformas que exige la plebe. El conflicto ético y de valores estalla. Roma se tambalea. Aparece la posibilidad de la imposición de un poder tiránico, los astutos tribunos manipulan al pueblo, rechazan a Coriolano como cónsul y consiguen desterrarlo de Roma. Éste se une a su peor enemigo Aufidio, caudillo de los Volscos. El drama político deriva en tragedia. Coriolano se enfrenta a su pasado, a sus seres queridos y a su vulnerabilidad. Su destino cae a golpe de espada.
Antonio Simón, director de escena. Qué hace un magnífico trabajo con un escenario llamativo donde los actores tienen que subir y bajar. Y además hacen que el público participe y forme parte de la historia que se cuenta.
Pretendo acercar al público de hoy este gran texto porque un clásico lo es en tanto sigue dialogando y abriendo interrogantes. – explica Simón- Acercar implica que el público reconoce y se reconoce en diferentes situaciones. Pasado y presente se unen. Para ello me he decantado en respetar el canon del espacio vacío en donde la palabra, la emoción y la presencia del actor y la actriz sean los protagonistas de esta tragedia.
Sobre el montaje comenta. “Es contemporáneo e intemporal, uniformes de políticos, uniformes de militares conviven con una lucha a espada corta. El espacio plantea la metáfora de una gran mesa encrucijada en donde suceden los acalorados debates políticos y parlamentarios, batallas y duelos, y la contemplación de las pulsiones desmesuradas de las emociones de los personajes. Un fórum público de debate que demandará al público asistente una cierta implicación en el seguimiento de los conflictos que llevan a la caída de Roma, in extremis salvada por la actuación de la embajada femenina que cambia el acontecer de la contienda bélica final. Un espectáculo que busca hacer vibrar e implicar al público ofreciéndole la posibilidad de identificarse tanto con el pueblo, como con el senado en un juego de espejos. La violencia, la ironía, el lirismo, la emoción y las pasiones, el humor y la potencia de lo humano son el sello del teatro de Shakespeare”.
El elenco es muy bueno, pero sin duda alguna Roberto Enríquez quien protagoniza a Coriolano, se consolida como un excelente actor que transmite emociones y su instrumento vocal es impactante en escena. Es un actor reconocido por sus trabajos, lo ha visto en varios programas de televisión y sin duda es camaleónico. Pero verlo en teatro es apabullante.
Si a él se suma una primera actriz como Carmen Conesa, que hace de la madre de Coriolano (Volumnia), la obra se derrama de talento. “Coriolano” es una obra que dan ganas de volver al teatro y recomendarla. Es una puesta para hablar de ella con los amigos y familiares.