Cierra Inifed por “Moches”; AMLO
*Gabinete, Larga Curva de Aprendizaje; Ricardo Monreal *Martí, Entre la Reelección o el Relevo
Argonmexico / El … El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció la desaparición del Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (Inifed), cuyos recursos para reconstrucción y remodelación de escuelas serán entregados de forma directa a maestros y padres de familia, mediante un comité que se establecerá en cada plantel.
Vale recordar que el Inifed sustituyó en enero de 1996 al Comité Administrador del Programa Federal de Construcción de Escuelas (CAPFCE), creado en 1944 por Manuel Ávila Camacho, y cuyo objetivo central consistía en construir las escuelas y aulas en cualquier lugar del país donde hiciera falta un centro educativo.
Y de un plumazo zedillista, el CAPFCE perdió su derecho y obligación, con todo y presupuesto, para construir escuelas y aulas; sus funciones fueron transferidas a nuevos institutos estatales; mientras que al Inifed, le dejaron la única tarea de “promover el mejoramiento de la infraestructura física educativa pública”, sobre todo con carencias o daños causados por fenómenos naturales.
A partir de entonces, incluso durante el triste mandato de Vicente Fox, gran parte del presupuesto del instituto se perdió en obras pocas veces confirmadas, la mayoría concedidas por asignación, no por licitación; lo cual generó suspicacias de una rampante corrupción coronada con la construcción de la Biblioteca José Vasconcelos, que a la primera lluvia torrencial se inundó.
Durante el sexenio pasado, el gobierno peñista anunció con bombo y platillo la creación del programa “Escuelas al Cien”. Le destinaron recursos millonarios al Inifed y, de cuando en cuando el presidente, el secretario de Educación y uno que otro gobernador inauguraban obras en escuelas; pero su “Talón de Aquiles” llegó con los sismos de septiembre de 2017.
Pasado ese trágico 2017 y concluido el gobierno de Peña Nieto, cientos de escuelas que sufrieron daños desde severos, para requerir la demolición y reconstrucción del plantel, hasta menores, no recibieron la atención del Inifed. Por ello, sus oficinas en la ciudad de México fueron bloqueadas muchas veces por padres de familia y alumnos cuyas “escuelas al cien” no quedaron ni al 20 por ciento.
Hace más de 10 días, durante una gira por Ciudad Cuauhtémoc, en el estado de Chihuahua, López Obrador anticipó la desaparición del Inifed. Después, en una de sus ruedas de prensa “mañaneras”, en el Salón Tesorería de Palacio Nacional, previno:
– Muy pronto viene una decisión que se las adelanto. Todo lo que tiene que ver con construcción de escuelas, reparación de aulas, mejoramiento de instalaciones educativas, conservación de planteles; todo se va a entregar directo a las sociedades de padres de familia desde aquí, desde la Tesorería de la Federación, para que con esos recursos los padres mejoren las escuelas donde estudian sus hijos.
E insistió en que, de ese modo, los recursos se enviarán directamente a las escuelas, “porque antes pasaban por todas las dependencias de gobierno y no llegaban, o llegaban con moche”. Se acaban los moches en ese rubro…
Los puntos sobre las íes… A punto de cumplir un año de ganar la elección presidencial, Ricardo Monreal dice: “veo al Presidente muy activo, proactivo, muy dinámico; no descansa y no ha descansado un solo momento. Y veo un gabinete que no está en el acompañamiento; que la curva de aprendizaje ha sido larga, pesada… Me gustaría ver un gabinete más cercano a él. Siento al Presidente que hace todo, conduce todo y necesita que su gabinete lo acompañe más”.
Ante los medios, el coordinador de la bancada de Morena en el Senado opina también que “se deben mejorar algunas situaciones de relación con los medios (de comunicación), la relación con los inversionistas y empresarios. La reconciliación es buena, hay que hacerla efectiva”.
Sin dejar de afirmar que López Obrador “va a ser el mejor Presidente de la República que haya habido en los últimos tiempos”, y hasta machaca: “No me voy a equivocar”.
Inquirido también si los legisladores morenistas deberían ser autocríticos hacia el gobierno, el político zacatecano resuelve: “nosotros no, porque, aunque somos serios, la crítica se la dejamos a la oposición, si no, el Presidente se quedaría solo; aunque sí tenemos autocrítica en corto con los funcionarios y los secretarios.
“En términos generales veo una conducción (del país) correcta. La autocrítica podría ser: veo al Presidente muy activo, muy proactivo, muy dinámico, no descansa; no ha descansado un solo momento. El gabinete debe acompañar más al Presidente”.
Antes, sostuvo que nadie coincide con los excesos y, en lo personal, “creo que no deben presentarse ni sufrir recortes (presupuestales) en salud, política social y educación. Esos rubros deben cuidarse y no pueden reducirse las partidas presupuestales.
“Al contrario, hay que aumentarlas, porque educación, ciencia y tecnología, salud y política social, son la columna vertebral del país y del desarrollo de la Nación. Entonces, ahí sí yo cualquier recorte, sacudida o disminución de recursos, no estaría de acuerdo. Concedo que hay preocupación y que a veces se actuó de manera ilimitada en el recorte de algunas de estas prioridades que, estoy seguro, se van a corregir”.
Respecto a la posibilidad de que su compañero de bancada Martí Batres continúe en la Presidencia de la Mesa Directiva del Senado, Monreal Ávila rechaza que él ya se haya pronunciado en ese sentido.
Añade que, dentro del Grupo Parlamentario hay libertad. Hay quienes se inclinan por una mujer, a propósito de esta corriente de paridad de género; y hay quienes incluso piensan que si no se cambia de género puede ser otro hombre, renovar la Presidencia. Y hay quienes también apoyan la reelección.
Revela que el asunto se decidirá en el grupo de manera libre, en votación abierta, en urnas transparentes, entre 15 y 20 de agosto cuando él convocará a los 59 integrantes de la bancada de Morena y sus aliados, para que emitan su voto de manera libre “y que yo obedezca la mayoría de los que sufraguen… Los que quieren que haya una mujer en la Presidencia, los que quieren que haya una reelección o quienes quieren la renovación en la Presidencia.
Incluso descarta que dicho encargo pudiera recaer en alguien de la oposición.
¿Pero Martí dice que cuenta con tu voto?
– No, no es así. Yo lo respeto mucho. Creo que su trabajo ha sido muy eficiente, que ha sido muy buen Presidente, muy buen conductor; pero no le he dado por adelantado mi voto, tampoco lo he rechazado. Pero no me he definido…” Pronto veremos de qué lado masca la iguana…