Cercenar Programas Productivos de Campesinos es un Atentado Contra Estabilidad Social de México: Diputado Ismael Hernández Deras
Por Daniel Gómez Trejo
Argonmexico / “Si por el bien de todos, primero son los pobres”, entonces que el Gobierno federal cumpla con la promesa presidencial para reasignar recursos al campo mexicano, sector donde vive el 20 por ciento del total de la población de este país y aporta el 4 por ciento del Producto Interno Bruto, demandó el diputado Ismael Hernández Deras.
Al iniciar el debate del paquete económico 2020, el diputado integrante de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, expuso que el Grupo Parlamentario del PRI no está de acuerdo con cercenar los programas productivos de los campesinos, pues en ello va la estabilidad social del país.
En el campo viven los más pobres de los pobres entonces, “cómo se explica que el Programa Especial Concurrente, que es el que atiende al campo en todas y cada una de las dependencias del gobierno tiene una reducción significativa, o sea, de cada 100 pesos que viene en el proyecto de Presupuesto para el 2020, solamente 5.40 centavos van destinados para el campo mexicano”, insistió el legislador priista.
La reflexión es que si la meta oficial es crecer entre 1.5 y el 2.5 del PIB, no es conveniente reducir el presupuesto en rubros como infraestructura carretera, turismo y apoyos productivos para el campo.
Hernández Deras advirtió que el intento de recortar un 32 por ciento los recursos a la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural tendrá consecuencias, la administración vigente no ha calculado los graves riesgos sanitarios, ambientales y de mercado que va a provocar, “hay riesgo para la salud humana, la productividad, el abasto de básicos y la estabilidad social” dijo.
El presupuesto para el campo mexicano decrece en la iniciativa de Presupuesto de Egresos 2020, en 4.4 por ciento; el crédito flexible y barato para los campesinos, se reduce al 70 por ciento; los apoyos para el cuidado al medio ambiente 41 por ciento, en competitividad 40 por ciento y se elimina el Programa de Concurrencia para las entidades federativas; productividad y competitividad agroalimentaria, y fomento ganadero; en contraste, aumenta el gasto administrativo del Gobierno en 15 por ciento. “En este caso la austeridad debe ser al revés, más gasto productivo para el campo, y menos gasto administrativo”, expuso.
Hernández Deras exigió defender los recursos de este sector para poder competir, exportar y dar valor a los productos primarios, pues sin justicia presupuestaria al campo no habrá desarrollo para México.