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Huachicoleo de Agua y Leyes Deficientes Contribuyen a su Acceso Inequitativo: Mónica Almeida

Por Daniel Gómez Trejo

Argonmexico / México pierde hasta el 60 por ciento en dotación del servicio de agua potable debido al robo, merma por distribución y facturación, aunado a ello la falta de monitoreo ha desencadenado pérdidas millonarias, consideró la diputada del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (GPPRD), Mónica Almeida López.

Pese al intento de las autoridades locales de erradicar el robo o huachicoleo de agua potable en diversos estados del país, no se ha logrado combatir de forma eficaz, lo que es considerado de acuerdo a la legisladora como el “bache económico del país”.

“A pesar de que el derecho al agua potable es elemental para la vida, las autoridades a lo largo de los años, han relegado este tema, muestra de ello es la falta de tecnología para evitar el robo o desperdicio de este insumo”, indicó Almeida.

Precisó que de toda el agua dulce en México, el 22.7% está contaminada, el 32.2% se tiene que tratar para utilizarse y solo el 44.1% tiene buena calidad, por otro lado el 9% de las personas carecen a su acceso, razón por la cual, para dotar de este derecho, se tienen que contemplar distintos gastos y costos, que implica una fuerte inversión económica para los gobiernos, lo que puede variar dependiendo la ubicación geográfica y características climáticas y poblacionales de cada región.

La diputada federal por el Estado de Jalisco precisó que planteará una gestión integral que atienda la investigación y  la ciencia  y se mantenga alejada de los intereses particulares y económicos, para lograr un entorno sustentable para las siguientes generaciones, que de acuerdo a la diputada federal garantizaría un mejor futuro hídrico para el país.

Reconoció que la mala planeación y toma  de decisiones equivocadas de algunos funcionarios públicos de todos los niveles de gobierno, ha generado que se dificulte el acceso de agua potable a la población.

Aunque la Organización Mundial de la Salud considera que una persona necesita en promedio entre 50 y 100 litros de agua potable para satisfacer sus necesidades básicas y evitar problemas de salud; y su costo no debe sobrepasar el 3% de los gastos familiares, en algunos lugares de nuestro país para poder dotar de agua a los hogares, tiene que subsidiar entre el 65% y el 80% de su costo real.

Por ello, la legisladora propone priorizar presupuestalmente los derechos del mínimo vital, es decir aquellos que garantizan que cada ser humano pueda tener una vida digna.