Cardenche y Polifonías a Capella Entre Alegría y Melancolía
Leslie González
*En la ENAH se realizó un concierto a cargo de Martajados del Real, agrupación dedicada a la difusión e interpretación de dicho género musical *Abarca temas como el amor, el desprecio, el corazón roto y el dolor
Argonmexico / La Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), dependencia del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), órgano de la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, llevó a cabo en su explanada principal el concierto de “Canción cardenche y Polifonías a capella”, a cargo de la agrupación Martajados del Real, que se dedica a la difusión y a la interpretación de dicho género de canto del Camino Real, Tierra Adentro.
Con motivo del octavo aniversario de la agrupación, Ruy Guerrero (voz principal y dirección musical), Gabriela Freixas (voz contralta y arrequinte), Juan Manuel Cervantes y Antonio Ruiz Caballero, (voz marrana y arrastre), resaltaron en entrevista que es un honor y una fiesta festejar con música.
“Queremos celebrar esta vuelta del sol, de este camino en el que se ha engrosado el aprendizaje que tenemos en este tipo de cantos. Para el octavo cumpleaños queremos celebrar aquí en la Escuela Nacional de Antropología e Historia con un mosaico de los diferentes cantos que hemos aprendido y de los nuevos retoques que se han adquirido también en el camino”, recalcó Guerrero.
Durante el concierto, en el que el público disfrutó de un repertorio de diferentes piezas de la tradición oral de México, predominó la alegría, la melancolía y el desgarro a través del canto, el cual no va acompañado por instrumentos.
“Es una interpretación que se hace desde dos y hasta cinco voces que se van alternando y se van dando muchos fenómenos de improvisación. Es un género muy particular. El cardenche, como tal, tiene en su repertorio músicas de amor, de desprecio, de desgarro y expresa mucho el dolor también. Entonces digamos que se hace mucho de metáforas”, subrayó la única voz femenina de la agrupación.
El canto cardenche es el resultado de procesos históricos, estéticos y culturales: “Específicamente se ubica en la región lagunera entre Durango y Coahuila. Pero nosotros hemos visto que es una expresión muy difundida en todo el Camino Real de Tierra Adentro, aunque no necesariamente se llame cardenche. A veces solamente se llama canción como tal, canción de basurero, canción de monte”, explicó Gabriela Freixas.
Cardenche deriva del cardo, una planta con espinas que se clava fácilmente, causando más dolor al retirarse y desgarrar la piel. “Cactus cardenche, que es una espinita, entra como el amor, entra bien rápido, pero cuando sale desgarra. Y el canto cardenche es eso: desgarro. Pero también nosotros desde grupo Martajados del Real insistimos que también es la flor del cardo, es la parte bella, hermosa que también está dentro de las letras y de la expresividad de esta música”, recalcó el director musical.
Dicho canto se transmite por generaciones, el repertorio se interpretaba tanto en las iglesias, como después de largas jornadas en el campo; se distinguía por el sentimiento desgarrador, por ello –detalló Antonio Ruiz– es una de las expresiones quizá más conocidas en nuestro país, o a la que se le ha dado más importancia. Desde la agrupación Martajados del Real procuran dar ese valor e importancia.
“Muchas veces es una expresión que no es vista por los investigadores, ni por el público, porque son tradiciones que están ahí, que se usan para cuando hay difuntos, para cantar en medio de los rosarios, de las velaciones o de las imágenes religiosas, por ejemplo”.
Los Martajados del Real se conocieron en Querétaro; hace ocho años se reunieron de con la misión de difundir y acercar al público la memoria sonora del Camino Real de Tierra Adentro (que va desde la Ciudad de Mìxico, hasta Santa Fe en Nuevo México, Estados Unidos).
“No nos quisimos llamar de una zona en específico, creo que somos chilangos de nacimiento, aunque vivimos en diferentes estados. Somos un revoltijo de muchas cosas, justo como esta música, además de que nos gustó el nombre de Martajados haciendo alusión al maíz quebrado, que deja ver su naturaleza un poco ríspida”.
Su repertorio incluyó cantos cardenches, alabados (para los funerales de cuerpo presente), alabanzas (piezas religiosas dirigidas a lo divino), misterios, cantos de velación y de pastorela (que pueden llegar a tener una duración de hasta 12 horas). Algunos temas que tocan en sus interpretaciones son historias de amor, desamor y desprecio, las estrellas, el sol, las flores, el desierto y las pérdidas.
A lo largo del concierto, los integrantes de la agrupación compartieron con las y los asistentes comentarios, anécdotas y datos sobre las piezas y la tradición musical en general.