“La Ropa no Puede Esperar”; la Otra Cara de #UnDíaSinMujeres
Por José M. Rojas Fierro
Argonmexcio / Estado de México.- En las zonas rurales de Almoloya de Juárez, para algunas mujeres les fue imposible parar sus actividades, pues las labores del hogar no pueden ser desatendidas.
Tiendas, tortillerías, estéticas y otros negocios no pararon este 9 de marzo y abrieron de manera normal, tal y como ocurrió con un grupo de amas de casa que acudieron al ojo de agua de Almoloya de Juárez para lavar a mano, pues refirieron: “la ropa no puede esperar”.
“Me dijo mi esposo en la mañana que no viniera a lavar porque era el Día de la Mujer, sólo le dije: está bien me quedaré en casa, pero tienen que llevarse los mismos calzones, pues los demás están sucios y sólo se río”, indicó Alicia Ramírez, ama de casa que este lunes acudió como de costumbre al ojo de agua a lavar su ropa de la semana.
En un recorrido realizado por varios puntos de la ciudad, fue evidente que hay muchos negocios atendidos por una mujer que abrieron de manera normal y no se sumaron al paro nacional anunciado para este lunes.
“Yo sí tengo que trabajar, pues si no no hay para la comida. Es bueno eso del paro, pero hay muchas mujeres que no nos podemos dar esos lujos”, señaló Sonia García, quien atiende una tortillería en la ciudad de Toluca.
Al igual que Sonia, otras mujeres provenientes de distintas partes de Almoloya de Juárez, tales como el Barrio de San Pedro, San Miguel Almoloyan, así como Santiaguito, acudieron como siempre a la cita de este lunes en el río del ojo de agua.
“Cada ocho días venimos el lunes a lavar a mano la ropa de la semana, ya llevamos varios años y pues tenemos que hacerlo para tener la ropa de la familia limpia”, señaló una ama de casa proveniente del Barrio de San Pedro.
Detalló que acuden a este lugar debido a que no les llega agua y se ven en la necesidad de acudir al río, y aprovechan no sólo para lavar la ropa sino para bañarse junto con sus hijos.
Aceptó que mientras ellas lavaban su ropa a mano en piedras del río, otras mujeres habían optado por quedarse en casa y no acudir a trabajar, reconocieron que ellas no se pueden dar ese lujo, pues, insistieron, “la ropa no puede esperar”,
Indicó que la ropa de su esposo y sus hijos debe quedar limpia para la semana, por lo que ni siquiera pensaron en no acudir al río. A lo mejor, dijo, “si hay mujeres que no van a trabajar, pero acá es distinto, las tareas del hogar no te permiten tomarte esos lujos”
“Hay que hacer quehacer, la comida y lavar, no podemos quedarnos aplastadas sin hacer nada. Imagínate, nos quedamos sin comer si no hago nada y eso no podemos hacerlo”, agregó doña Ramira vecina de San Miguel Almoloyan.
Detallaron que generalmente acuden desde las 8 de la mañana para terminar de lavar antes de las 13:00 horas, pues tienen que llegar a casa para ir a recoger a los niños a la escuela y prepararles de comer.
“En mi caso contrato un taxi que me trae con todo y mi ropa, ya cuando termino viene por mí y me voy a casa. Sí sabía que iba a ver algo por el Día de la Mujer, pero eso aquí no cuenta. El hogar es el hogar”, subrayó el ama de casa que iba acompañada por una de sus hijas.