Carente de Legitimidad y sin Validez Legal la Consulta del Tren Maya: Reyes Montiel
*Redacción Argonmexico/Realmente le importan poco o nada al gobierno la opinión ciudadana, pues el proyecto ya está en marcha desde hace meses, afirmó la diputada.
La consulta sólo sirvió al Gobierno para tratar de legitimar el despojo de tierras a ejidatarios a fin de satisfacer intereses de grupos económicos
La diputada Claudia Reyes Montiel calificó de “farsa” la consulta del Gobierno Federal sobre el Tren Maya, pues además de carente de legitimidad y validez legal, tuvo escasa participación y se hizo sobre un proyecto ya en marcha desde hace meses por imposición del Presidente Andrés Manuel López Obrador, quien con esa obra busca satisfacer a grupos económicos nacionales y extranjeros.
La Secretaria de la Comisión de Economía, Comercio y Competitividad de la Cámara de Diputados recordó que el mismo Presidente confesó meses atrás y durante una visita a Hecelchakán, Campeche, que “llueve, truene o relampaguee, se va a construir el Tren Maya, lo quieran o no lo quieran”.
Lo anterior se tradujo en que, durante los últimos meses, se trabaja para materializar la obra, independientemente de lo que se dijera en la consulta realizada el pasado fin de semana y cuyos resultados se dieron a conocer al lunes siguiente.
De los millones de habitantes de Yucatán, Quintana Roo, Tabasco, Campeche y Chiapas, en dicha “consulta” sólo participaron unas 34 mil personas, la gran mayoría de ellas carentes de información para valorar dicho proyecto, esto a pesar de que muchos miembros del Gobierno Federal la publicitaron ilegalmente.
“Es decir, no hubo ninguna imparcialidad ni objetividad por parte de las autoridades para que la votación se hiciera de manera libre”, dijo Reyes Montiel.
La también integrante de la Comisión de Turismo consideró esta “consulta” -realizada al margen de autoridades legalmente facultadas para ello, sin metodología en el cuestionario y sin infraestructura ni seguridad para evitar cualquier posible fraude- como un acto demagógico más del actual Presidente de la República.
“Como vemos, la obra va porque así lo decidió el Presidente, sin importar lo que la gente dijera, como tampoco importa el hecho de que varios especialistas han señalado que la construcción del Tren Maya afectará el medio ambiente o zonas arqueológicas con un importante valor histórico y cultural para nuestro país, como recientemente lo han señalado especialistas de la UNAM”, dijo Reyes.
La verdad –agregó- es que ni la consulta ni la opinión de los expertos importan al Presidente, quien ha dejado en claro que se hará lo que él quiere, dando con esto una muestra más de su talante autoritario y demagógico.
“El Presidente se dice un demócrata y esta consulta la presentó como una muestra de ese supuesto espíritu democrático, pero la verdad es que la forma en que se realizó esta consulta es propia de un gobernante demagogo”, acotó la parlamentaria perredista.
Reiteró que el Tren Maya realmente no es un impulso del desarrollo nacional por parte del Estado, sino la continuación del modelo neoliberal, que sigue tan vigente como antes, pues la obra responde, más que a un interés nacional, al de grupos económicos nacionales y extranjeros.
Por ello no le importa al Gobierno despojar de sus tierras a los ejidatarios y segregar a los pueblos originarios que habitan en la zona por la que cruzará el tren y más bien la consulta le sirvió para tratar de legitimar ese despojo.