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Hidalgo: Deuda al Alza, Inversión a la Baja: Cero Empleos

Por Adamina Márquez y Sergio Pasarán / Colaboradores Especiales

Segunda y Última Parte

Argonmexico / PACHUCA, Hgo.- Desde el inicio de su gestión, Omar Fayad ha puesto en marcha toda una política de atracción de capital privado justificada en el discurso de la creación de empleos. Su iniciativa ha requerido viajes al extranjero a cargo del erario, reformas a la legislación local y hasta una nueva campaña de comunicación social con slogan a modo: “el nuevo destino económico de México”.

El 16 de abril pasado, la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) del estado difundió un boletín en el que daba a conocer la aplicación de 50 millones de pesos del presupuesto estatal, para mantenimiento e infraestructura de siete parques industriales.

“La estrategia para la atracción de inversiones y generación de empleos, planteada por el gobernador Omar Fayad, enfoca el esfuerzo en este rubro hacia el fortalecimiento de los parques industriales, detonadores del desarrollo económico de las regiones”, afirma el titular de la Sedeco, José Luis Romo Cruz.

Hasta 2004, en esos parques operaban al menos 503 empresas de origen belga, estadounidense, japonés, español, sueco, coreano y mexicano. Marcas como Barcel, Casaflex, Cargill y filiales de Mitsubishi se encuentra entre las más populares. Es precisamente a estas empresas a las que el gobierno tiene que subsidiar con infraestructura y mantenimiento porque de otra manera se niegan a invertir, aseguró Fermín Garrido Baños, director general de Fomento e Infraestructura Industrial, en una entrevista a un diario nacional.

“No había forma de que llegaran empresas porque le faltaba infraestructura, un parque sin infraestructura no es muy útil y las inversiones fuertes regularmente no las quieren hacer las empresas, entonces hay que ayudarles”.

La política de subvención a los corporativos no es nueva para los hidalguenses. Las anteriores administraciones de Francisco Olvera y Osorio Chong también aplicaron medidas similares con el fin de facilitarle el terreno a la inversión privada. Entre ambos adquirieron créditos bancarios por poco más de 5,547 mdp.

En 2008, Miguel Ángel Osorio Chong adquirió un préstamo bancario por mil 500 millones de pesos para comprar 700 hectáreas de terrenos ejidales destinadas a la construcción de la refinería Bicentenario en Tula, el gran proyecto nacional de 2009; que generaría 100 mil empleos, pero en 2013 fue cancelada por Petróleos Mexicanos.

Esa decisión adoptada por el gobierno federal que encabezaba el panista Felipe Calderón provocó que Hidalgo se quedara con una deuda millonaria y con un terreno que hasta la fecha permanece improductivo.

Cinco años después, en 2013, su sucesor Francisco Olvera endeudó nuevamente al estado con un crédito de 636 millones de pesos, para adquirir terrenos en la zona del Altiplano, porque la entidad competía para ser sede de la armadora automotriz alemana BMW.

Pero al final, la planta automotriz se orientó por elegir a San Luis Potosí como su base; por lo que Hidalgo otra vez en el aire se quedó. Ahora, cada hidalguense en edad de trabajar deberá pagar cuatro mil 870 pesos vía impuestos, para saldar préstamos bancarios que generaron cero empleos.

Engaño y Simulación en Inversiones: Intelectuales

En junio pasado Omar Fayad prometió que ahora sí los empleos llegarían a Hidalgo con la inyección de 13 mil millones de pesos de las empresas Global Housing Solutions, de origen austriaco; y ESSITY, de origen alemán. El objetivo, dijo, es la generación de 460 empleos directos.

Para Virgilo Guzmán Valdés, presidente de la Asociación de Escritores Hidalguenses y fundador de la Comisión Hidalguense de Derechos Humanos, estas medidas no mejorarán sustancialmente la situación de miseria del estado o el bajo nivel de desarrollo, pues no van dirigidas a mejorar la calidad de vida del sector más vulnerable: el campesino.

“No hay empleo, hay mucha demagogia, engaño y simulación. Como siempre, siguen favoreciendo a los que ya tienen; a la iniciativa privada, a la que además nunca se les investiga sus actos de corrupción y transparencia. Les dan todo (a las empresas), terrenos, agua, les van a poner todo. Le llaman generar empleo; obviamente es para llevarse la riqueza de la fuerza de trabajo de la gente”.

En entrevista, el escritor aseguró que independientemente que el gobierno busque apoyar a la iniciativa privada, los impuestos y el costo que esto genera lo pagan todos los hidalguenses. Aunado a ello, la población común sigue sin encontrar bienestar.

“La sociedad es la única que paga los impuestos, vienen principalmente del trabajo, se le cobra a fuerza, es de la gente, pero la gente no encuentra bienestar. Es lamentable esa política que está sirviendo a unos y no a los pobladores que buscan desarrollo. Parece que (al gobierno) le gusta obtener y nunca perder el control, por eso los tienen amarrados por la miseria, la pobreza, la necesidad”.

A decir de la Sedeco, ocho de las 12 nuevas inversiones que anunció Omar Fayad se asentarán en los parques industriales del Altiplano, la zona sur del estado (colindante con la CDMX) y en Pachuca.

Sin embargo, los municipios que registran mayor grado de marginación por falta de empleo no son los del sur, sino los del norte de la entidad, los ubicados en la Sierra Alta y la Huasteca, donde predomina la población campesina indígena.

En los municipios de Yahualica, Xochiatipan, Tepehuacán y Calnali, por ejemplo, el 90 por ciento de la población está clasificada como muy pobre. Por falta de empleo y recursos económicos no puede acceder a una vivienda digna, a los servicios de salud ni a la alimentación.

Hasta el momento el gobierno no ha especificado si en la Huasteca y la Sierra Alta proyecta alguna inversión para generar empleos u otra acción para mejorar la calidad de vida de los campesinos nahuas.

“Estaría bien que (el gobernador) viniera acá para ver cómo vivimos y se dé cuenta”, dice Ana María Hernández, otra campesina de la Huasteca, porque aquí la gente ya no piensa en comprar leche, carne o huevo pues se truena los dedos hasta para comprar medios kilos de chile, jitomate, frijol y café. Aquí, hasta el azúcar es un lujo.