ColumnasDestacadosDevaneos (Ma. Elena Maldonado)

Puerto Vallarta 2017

Argonmexico

Acabo de llegar de Puerto Vallarta, paseo que les recomiendo ampliamente, el clima de este finales de abril y principios de mayo, no me trato con excesiva intensidades; incluso estuvo más fresco de lo que esperaba, en la noche obviamente yo situada en exteriores (la mismísima playa y el mar murmurando; las terrazas con música y muchas o pocas personas, paseos por el malecón, la marina) tenía que sacar un buen rebozo para cubrirme un poco. Algunas salidas de la alberca eran tiritantes – -seguro esa palabra no existe- había que envolverse en la toalla, incluso en las horas mañaneras del sol, pues el viento era una constante.

Un recorrido por su malecón es una delicia: tiendas, galerías, restaurantes, diez conjuntos escultóricos de diferentes artistas, los hay clásicos, suprarealista, románticos, de vanguardia. Su plaza, desde donde podemos ver las torres de la parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe, un templo neoclásico que tiene una interesante historia; el edificio simplón del ayuntamiento, el Museo Histórico Naval de Puerto Vallarta, que está reinaugurado apenas el pasado octubre en el que se expone una muestra de la historia de México en relación con el mar, a partir de la importancia de la navegación: en la época prehispánica, la conquista y la contemporánea. La colección permanente exhibe en cinco salas: pinturas, maquetas, fotografías, documentos, cartografías, modelos a escala e instrumentos de navegación. Exhibe una colección de armas conocidas como mosquetón, de las cuales una de ellas es de manufactura mexicana.

Los temas que se exponen abarcan expediciones y descubrimientos del Mar del Sur, expediciones hacia las islas Filipinas, el tornaviaje de la Nao de China, el viaje de los Galeones y la defensa de las flotas. Resalta la temática sobre el inicio del asentamiento que más tarde se convertiría en Puerto Vallarta, así como una breve reseña histórica del mismo, el apostadero de San Blas y tanto la organización como funciones de la Armada de México. Tiene unas pantallas digitales, un teatro, una linda y económica cafetería desde donde podrá ver pasar el tiempo escuchando el oleaje , observando el mar, el cielo, los turistas y transeúntes cotidianos, saboreando una margarita . Si le toca una noche de museos, el horario se extenderá hasta las once de la noche. De regreso me detuve admirando la valiente y armónica rutina del descenso por aire de los Voladores de Papantla.

Para acabar este largo y satisfactorio recorrido cenando en la terraza de un delicioso restaurante, haciendo los planes para el día siguiente.

A tan solo quince minutos de Puerto Vallarta, disfrute Bucerías “lugar de buzos” que es un pequeño poblado en la Bahía de Banderas, reconocido por su folklore y estilo de vida en donde se encuentran casas con fachada color púrpura, los bellos amaneceres y atardeceres, un sitio para relajarse en donde podrá contemplar el sigiloso vuelo de las aves, disfrutar de largas caminatas por la playa, paseos a caballo, surfear y por supuesto bucear. En el corazón de este pueblito encontrará la típica plaza central, su mercado local, galerías, lugares de hospedaje, una pequeña iglesia dedicada a la Virgen de la Paz, a la que se festeja durante enero puede participar en su fiesta tradicional que consiste en peregrinaciones por mar, en lanchas adornadas con representaciones vivas y motivos religiosos, quema de fuegos artificiales, danzas, antojitos mexicanos y lo que se acumule. Ahí está el colegio y encantadores restaurantes donde se sirven los más frescos platillos de mariscos y otras especialidades.

En mi primer paseo por sus arenas de pronto veo sobre el mar unas coloridas telas y resulto que eran jóvenes practicantes de un nuevo deporte –por lo menos para mí- que nombran kite surfing o kitesurf, se trata de un deporte de deslizamiento, que efectivamente cuenta con una especie de paracaídas, en realidad llamado cometa (kite en inglés). Esta cometa funciona como tracción al viento y quien ha desarrollado las habilidades lo dirige con su manos a través de unas líneas sujetas a una barra, de esta forma se desliza sobre una plataforma en el agua, sobre la que la o el deportista va parado; como sucedería en skateborde de calle. Me dicen que los mejores lugares son aquellos que poseen aguas calmadas con mucho viento como sucede en estas ideales costas de la Riviera Maya.

Por cierto les recomiendo un excelente restaurante cuyo nombre Sukha lo describe ampliamente, ya que su significado en sánscrito –la lengua sagrada de la India- es “lo más satisfactorio de la vida” un agradable espacio con diferentes ambientes –una hamaca, sillas colgantes, sillones, la mesa cotidiana, los camastros en la playa- usted elija. Una excelente atención y una comida con la que dará placer y sorpresas a su paladar. Además cuenta con un bungalow que puede rentar, con todas las comodidades por aquello que usted quiera ampliar su visita. Y vivir la noche de Bucerias.

Unas cuantas sugerencias de los disfrutes de Vallarta y sus alrededores. Hay infinidad de opciones, seguramente habrá ido y conocerá varias de las mil posibilidades de pasarla bien y bonito. Días Felices en donde quiera que esté.